LA ALBERCA, PUEBLO EJEMPLAR
-LOS VALORES DE LA TRADICIÓN-
EL SANTO HOSPITAL
EL SANTO HOSPITAL
Tratando con un poco más de profundidad
este setenta y cinco aniversario de la
Declaración del Primer pueblo de España con el título de Monumento Nacional. Hemos
de decir que quienes conocemos nuestro pueblo este título tan agradecido, sin
embargo en la titularidad del mismo, nos pareció siempre un poco corta.
La palabra monumento puede inducir a error si tomamos la
misma en la superficialidad que se puede concebir en su aspecto externo de “pueblo
bonito” y nada más.
El ejemplo de nuestro pueblo estuvo
además de sus encantadoras calles que movieron a Ismael Blat a iniciar los
trámites, junto con otras personas y estamentos locales, para solicitar tal
galardón. No sólo para que se conservara su singular caserío sino también para
que se valorara su vida, sus costumbres; aunque con el paso de los tiempos se
supiera que muchas de ellas tuvieran que cambiar.
Recuerdo que mi padre cuando recibía a algunos
amigos y les invitaba a pasear por el pueblo, en el presente artículo de
Ciudades de Caridad está el más vivo ejemplo con el Director del Adelanto por
aquel entonces.
Pues bien, al hablar de La Plaza porticada
haciendo referencia a la frase de Ortega y Gasset “la época actual, no obstante
a sus pretensiones de riqueza y prurito de lo confortable, no puede hacer un
alarde semejante”. Y seguir hablando de su singular crucero, teatro, cárcel pública,
pesos y medidas, columna de pintores,.. Siempre se detenía en un “rinconcito”
que quizás otras personas se lo pasaran
por alto y sin embargo era altamente significativo. Hoy quizás se fijaran antes
en la Casa de las Flores que en el nuevo rótulo que pone Biblioteca y que
debería poner siendo fieles a la tradición: Biblioteca del Santo Hospital.
El Santo Hospital era un lugar de “acogida”
para que las personas que pasaran por el lugar no les faltara un techo donde
estar y estas personas podrían ser caminantes
que hacían el camino de Santiago, como transeúntes de todo tipo. Dispuso
durante un tiempo hasta de doce camas, se sufragaba por donaciones de las
tierras de las Hurdes, como por los vecinos del lugar que daban para su
mantenimiento y atizaban todas las tardes su farolillo.
¡Qué maravilloso ejemplo tradicional que
no deberíamos de haber olvidado, y sobre todo hoy, que estamos sufriendo las
consecuencias de que a miles de personas se les niegue “el asilo”, la acogida,
en las naciones más ricas de Europa!
Amigo lector detente a leer esta Atalaya
de Ciudades de Caridad y no pases por alto todo lo que está ocurriendo en la
actualidad y léela en esta palabra: HOSPITALIDAD.
Sin duda alguna que tiene que ser SANTA.
X-Plaza con Hospital, foto comienzos siglo XX
X-Ciudades Caridad, Por el Director de El Adelanto.
X-Composición Collage: Santo Hospital
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